
Cynthia Sommer, de 33 años, será sentenciada el próximo 23 de marzo por un juez de San Diego, al sur del California, donde corre el riesgo de ser condenada a cadena perpetua.
En febrero de 2002, el segundo esposo de Cynthia, Todd Sommer, que era miembro de los marines, murió a los 23 años por una supuesta crisis cardiaca, tal como se diagnosticó en ese momento. Sin embargo la policía comenzó a sospechar del comportamiento de la joven y alegre viuda e inició una investigación.
Después de haber recibido 250.000 dólares (192.000 euros) del seguro de vida de su esposo, Cynthia Sommer se sometió a cirugía estética para aumentar sus senos, multiplicó las aventuras con los hombres, organizó grandes fiestas en su casa e incluso viajó a México para participar en concursos de camisetas mojadas.
En 2003 las autoridades decidieron exhumar el cadáver de Sommer para realizarle una autopsia, que determinó una presencia importante de arsénico en algunos órganos.
Vía: Diario ADN. Foto: Compumedicina.
2 comentarios:
esas son las gringas...
que mujer mas perfida,cobarde y perversa,matar a su esposo con total seguridad para pagarse un capricho,por lo menos cadena perpetua merece,fue tan cruel que se excedio en su dosis de arsenico,pobrecillo el joven hombre,justicia yanki en practica ya!!
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