
Vienen equipadas con amplios bolsillos para llevar todas las herramientas necesarias permitiéndole al trabajador expresar su "libertad" a la hora de elegir cómo vestirse.
Hechas de algodón, las faldas para obreros son extremadamente frescas, permitiéndole al trabajador sentir la suave brisa entre sus piernas mientras levanta una pared o plastifica un piso.
"Inicialmente, lanzamos la pollera como un experimento. Pensamos que un número muy pequeño de osados se animaría a usarla. Sin embargo, resultó extremadamente popular", aseguró Susanne Kristianson, de Blåkläder, la compañía sueca que fabrica esta inusual prenda.
Vía: Madrid Digital.
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